
Foto tomada de Internet.
Con objeto de aclarar sus ideas, Marco decidió viajar a la Patagonia. Dejó todo atrás y no cesó hasta que el avión aterrizó en Puerto Natales. Antes, hizo escala en Punta Arenas, pero la ciudad de trazas modernas y a la vez señoriales, le resultó fría, como las aguas del Estrecho de Magallanes. En Puerto Natales el fresco también se dejaba sentir, pero a una escala, quizá, diferente.