.
Imagen tomada de Internet.
Llevaba horas avanzando entre la nieve y
tenía sed. Las estrellas en el cielo titilaban con un fulgor exaltado. Tenía
unas ganas tan delirantes de transmitir el mensaje que ocultaba dentro de mí,
que mientras el trineo, formado por el mejor tiro de perros malamute avanzaba,
apenas era capaz de observar a derecha o izquierda.