Descubrí a Jelena en la página treinta y tres de una revista porno. Nada más verla me subyugó su sublime belleza, sus ojos claros, su sonrisa agradable, su sexo pequeño y misterioso y seguramente, con sabor a almendra. Pensaba que era así porque me gustaba ese sabor entre dulce y áspero que tienen las almendras, y además, como perfume seguramente utilizaría esencia de almendras amargas.
Al principio la tenía en mi casa - iba un poco de furtiva - estaba dentro del armario de mi ropa interior, debajo del forro de plástico, no fuera a ser que mi mujer se diera cuenta de que había contraído compromiso con aquella exótica mujer y se pusiera celosa. Desde luego estaba en ello y sabía que tarde o temprano tendría que hablar con Laura sobre ese tema y los “demás...”
De momento no entendí oportuno hacerlo, creía no estar enamorado, hasta que una mañana reflexioné y me di cuenta; sí, lo estaba...
Ah, y lo más importante. Ella también se enamoró de mí.
Recuerdo con claridad el viaje que hicimos juntos. Tenía que cerrar un trato comercial con una compañía taiwanesa, y por primera vez no me sentí solo, triste, ni falto de sexo. Cada vez que nos reuníamos hacíamos el amor; a ella le gustaba ponerse a horcajadas sobre mí y disfrutábamos. Además, no había problema, tanto Jelena como yo estábamos de acuerdo; no deseábamos tener hijos. Nuestra relación estaba basada en el mutuo respeto y en leernos siempre las cartas de amor que escribíamos; la suya decía:
Hola, me llamo Jelena, tengo dieciocho años, el pelo castaño, ojos azul claro, estatura un metro setenta y seis. Medidas: 95-62-92 cm. Peso: 53Kg. Nací en Alemania: Rheinberg, Renania del norte, Westfalia. Soy contemporánea de Claudia Schiffer, pero yo soy bastante más zorra y calentona que ella. Tengo un piercing en el pecho, otro en la mejilla y un tercero... ¿a que ya sabes dónde? Por cierto me gusta follar, siempre me ha encantado hacerlo con machos en celo como tú. Vamos, no seas vergonzoso. ¿Te gusto verdad? Dime, ¿cómo te gusta más? ¿Por delante? Con las piernas bien abiertas ¿o prefieres por detrás? Sin compromiso, no te sonrojes ¿te excito? ¡A que si! Seguro. Bien guapo, aquí me tienes, ¡soy toda tuya!
Te quiere.
Jelena.
Me fascinaba. Nunca, ¡jamás! me había encontrado con alguien que hablara como ella. Estaba cansado de la hipocresía de la sociedad. La sinceridad había dejado de existir, y ahora todos, incluso los más allegados, hablaban en clave. Por ejemplo para Laura “ir a la peluquería los viernes por la tarde,” significaba encontrarse con el carnicero en una pensión donde echaban un polvo. Peor era el caso de mi director: “Reunión a Puerta Cerrada en el despacho los Miércoles,” significaba que Juanma, el jefe del Departamento Comercial, Luismi, de Contabilidad, y él echarían una timba de Mus. Si por el contrario llamaba a Revisión General, significaba que Martita, su secretaria personal, debía personarse en su despacho y engrasarle sus partes mediante una atenta y efectiva felación. Los demás me importaban un bledo, pero en el fondo lo sentía por Martita, pues tras salir de la sesión la llamaba el subdirector y bajo la sutil amenaza de revelar los trapos sucios a su novio – el honesto Manolo – la animaba a hacerle también una felación.
Peor incluso fue lo de los taiwaneses durante aquel viaje. La noche que recibieron a nuestra delegación, montaron una escandalosa inmoralidad. Nos reunieron en una sala atiborrada de mujeres con ojos oblicuos, rubias, negras, bajas, culonas, delgaditas, – ninguna le llegaba a la suela de los zapatos a Jelena – y los ejecutivos desmadrados, esnifando rayas de coca con champagne, caviar, sushi etc., no faltaba nada o faltaba de todo...
Volvía al hotel hastiado de la vida, la dejaba salir del cajón y me reunía de nuevo con su sinceridad, sus ojos despejados, su sonrisa acentuada y espontánea. La colocaba frente al espejo para que se embelleciera, me desvestía me duchaba y no cesábamos de dialogar un solo instante. Se me hacía duro tener que explicarle la decadencia del mundo. Ella se abrazaba a mí por detrás y podía sentir su aroma a almendras amargas. Me ayudaba a salir de la ducha, llorando desolado por el mundo nauseabundo y podrido en el que me había tocado vivir, sus manos suaves acariciaban mi semblante y secaban mis lágrimas mientras, suavemente, mediante susurros delicados y amorosos, como cloqueos de dulce pajarillo, me canturreaba palabras de arrullo. Me conducía hasta la cama y dejando escapar una sonrisa cristalina, me decía, “date la vuelta.” Yo la miraba y una vez más me quedaba hechizado. Se había arreglado con el vestido de satén verde que compré para ella en Versace, y estaba realmente hermosa, no, desde luego mi vida no merecía otra mujer. Quería que fuera mía para siempre, deseaba o hubiera deseado poder presentarla a mis amigos y explicar a mi mujer que lo sentía y lo que sentía, que me había equivocado de mujer. Podría pasar el resto de mi vida en aquella habitación sin salir y conseguir que nuestra existencia fuera perpetua, como una excelsa eyaculación, eterna y sin fin.
Claro que a veces se ponía un poco revoltosa y cambiaba de página, me la encontraba en la treinta y siete, besándose con su amiga Ulrika, la lesbiana. Luego, en ocasiones, se dejaba joder en la cuarenta y uno por Paúl. Reconozco que aquello me inquietó y molestó al principio, pero comprendí que ella era así y además, al final, siempre volvía a mí; yo era su preferido y me lo hacía saber ofreciéndose una vez más a mí con aquella mirada frívola. Y hacíamos el amor. Oh, ¡por Dios! como lo hacíamos... Si el mundo no tuviera fin podríamos pasar amándonos a perpetuidad...
El primer problema se presentó cuando quise llevarla al teatro chino de Taipei. No estuvo de acuerdo en salir de la habitación, prefirió quedarse con Ulrika, y sobre todo con Paúl. A la mañana siguiente eliminé a Paúl y tres días después acabé con Ulrika, no soportaba los celos. Lo cierto es que descubrí que con ellos hacía cosas que jamás haría conmigo, como permanecer unidos en un mismo plano, uno sobre el otro, tan cerca que llegaban a pegarse y arrancarse la piel; y todo, por amor. Pese a eliminarlos, aquello me hizo sentir francamente mal. Yo la quería y ¡necesitaba encontrarme a su altura! deseaba llegar a ser como ella, pero me resultaba imposible vagar todo el día sin apenas ropa, sobre todo con el frío que hacía en Taipei por aquella época. Ella, en cambio, resultaba así, natural, como Eva en el Paraíso.
Advertí por primera vez el cambio después de una semana y me quedé rígido y casi aterrado observando su rostro durante por lo menos cuatro horas. No lo ignoraba. La reunión para rubricar la alianza comercial era a las once de la mañana, pero aquello era tan grave que me sentí incapaz de asistir. Y así estuvimos, contemplándonos durante horas y Jelena ¡ni siquiera me habló! Se limitó a observarme con una inexpresiva mueca de burla y una sonrisa de desparpajo que no era la que yo conocía y además, su semblante estaba sucio ¡manchado de semen! Por lo cual deduje que mientras yo descansaba – soñándola – ella debía de haber transcurrido la noche fornicando con uno o varios hombres. Registré la habitación sin éxito, hasta que al final me di cuenta, la prueba estaba ante mí. Sólo tuve que abrir la revista en la página cuarenta y seis y mis sospechas quedaron confirmadas. ¡Era ella! Estaba con varios hombres. ¡Era una furcia! Una maldita...
No lo dudé. Enrollé la revista, la metí en una bolsa, bajé al mercadillo de la Plaza Central de Taipei, y como las publicaciones porno occidentales estaban bien cotizadas en dichas latitudes, la cambié por un bolso de piel para Laura.
Después subí al avión y todavía hoy la recuerdo con desconsuelo. A veces pienso en cómo habrá acabado y si realmente habrá acabado. Conociéndola, lo más probable, es que debido a su belleza y sabiduría, continúe conquistando corazones orientales, aunque sobre todo, gracias a su esencia de almendras amargas...
José Fernández del Vallado. Josef. Junio 2010.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
67 libros abiertos :
Josef: Me encantó esta historia !! tienes un talento tan grande para narrar y describir historias que, como ya te dije en más de una ocasión: vuelo a tus mundos olvidando mi alrededor.
Así es la vida a veces; hay tantas Jelenas que nos hacen sentir celos, pero en definitiva, no puedes olvidar su esencia de "almendras amargas" (En mi caso, pongamosle un hombre, por ahora no me atraen las mujeres.. jejejeje!!)
Te dejo mis clásicos: Un beso o 2!!
Y me encanta leerte :) demasiado :))
Qué bueno amigo!! Estuve algo tardía en los cuentos anteriores que, me honra llegar a tu espacio en primer lugar !!
Estoy contenta y FELIZ por ser hoy la primera !! :))))))))
Un beso o 2 !!
Hola cielo muy linda historia de amor lastima el final
un beso y feliz fin de semana
Ningún pudor para describir la pasión del amor y lo fugaz del sexo. Finales terribles, acordes con la realidad
Se me había tildado la PC y no me dejaba comentar que bronquita!
Bueno, que decir de este fabuloso relato que no escapa a una realidad que vemos a diario, quizas en la vida de todos los dias, existen estas personas, sus mundos, sus vidas.
En principio pensé el protagonista iba a dejar todo prejuicio de lado para entregarse de lleno a lo que parecia amor, un verdadero y desenfrenado amor.
Que pena que el final haya sido ese!
Me gustó mucho la parte de las hipocresias diarias!
Creo que no te guardas nada Josef y eso hace que cada relato sea estupendo, real.
Besos y abrazos y buen fin de semana!
Grcias Eleanor, me agrada que te haya gustado, de de tu gusto por lo literario y además has sido la primera en llegar.
Felicitaciones y un beso.
Gracias Luna siempre por tus visitas. es un placer tenerte aquí.
besos.
Gracias amigo Beelzenef.
Un abrazo.
Gracias Carla. Desde luego no me guardo nada. la vida es así, o por lo menos se le parece...
Un beso.
Me gustan tus relatos, este creo que supera o otros(para mi gusto).
El final real como la vida misma.
Besos
Es para disfrutar de este relato, dice tantas cosas, una gran mirada hacias los diferentes mundos que vivimos, las mezclas y variedades de esencias, como bien lo dice el título.
Besos:)
gracias anamorgana por venir. Si, es un relato que a mí también me deja satisfecho.
besos.
Gracias Angeles. De esencias, en efecto. De eso hablo entre otras muchas cosas en el relato, pero va de esencias y sentires...
besos.
Gran historia contada como debe ser sin remilgos y con total libertad, para pregonar todo lo que se puede disfrutar entre un hombre y bella doncela que no plebeya, la cual reluce como una fulgurante estrella
Me pareció un gran relato, me gustaron mucho los detalles.
Wooow es en serio es la primera vez que te leo con detenimiento y me ha gustado el escrito wooow me fascino... pero... si me hubiera gustado saber que paso... que sucedio con Jelena jajja nunca habia leido una porno jajaja
saludos y buen fin de semana
Que final tan triste Josef pero que história tan bonita ;)
este relato es especial... todo esta donde debe estar o asi por lo menos creo yo, con mis limites en esto del relato. Hay un acto magico aqui... algo que captura al lector y lo envuelve... lo hace complice mas que testigo...
felicidades... y gracias.
Un Abrazo.
Josef! Tanto tiempo que tenía dejado de lado tu blog (bueno, varios blogs, incluso el mío) pero bueno fue volver y ver tan buenas historias como siempre, una vez más repito que adoro tus historias, los relatos tienen una mezcla de todo, además de poder transportarte a esas historias y ser parte de ellas.
Un abrazo,
Jose Luis
Un relato que suena a realidad. Me gusta las des-inhibición en como describes la situación. Existen las Jelenas. Y también la hipocresía de nuestra sociedad moralista...
Me hubiera gustado un final feliz jajajajajaj como siempre. Pero bueno, por lo menos le llevo un bolso a Laura... jajajajajaaj
Un besazo mi adorable Josef.
No te puedes fiar de nadie.
Mira que la quería y mira como lo trató ella.
Mejor solo.
Saludos.
un final casi esperado y es que lo intenso suele esfumarse rápido... en cambio lo hipócrito del entorno parece que nunca tiene fin
besos Josef
Me sorprende que ninguno de los que habéis leído el relato hayáis hecho siquiera una mínima mención sobre el principal aspecto de jelena. No era real, de carne y hueso, sino la imagen de una revista porno. ¿Es tan difícil de entenderlo? Se entiende tan mal...?
Josef... estaba clarísimo, por eso no hacia falta (para mí) esta mención... si es que indicas las distintas páginas!! y es que a veces la imaginación es una forma de llegar donde la realidad no puede...
besos Josef
Es increible lo bien que realtas.
Un saludo amigo.
Interesantisimo
Perdón por la asusencia,
CIAO.
No, está muy bien elaborado y descrito tu relato, desde ayer te he leído varias veces y la ví de esa forma a Jelena, está clarísimo!!! Pero eso no fué lo que me impactó en realidad de éste relato en el encuentro bien estructurado, crudo y dentro de todo una realidad que sofoca. Luego te digo que me impactó. Extraordinario! Un fuerte abrazo!.
Buenísimo!! Tan bueno que hubo un momento que me creí ya estabais juntos, es increíble el poder de imaginación que tienes y la manera de plasmarlo al escribirlo..., parece totalmente real, (o yo me meto tanto en el tema que acabo casi creyéndome la historia tal como la relatas), desde luego las hipocresías de la vida son totalmente reales.
…y si, las medidas son de revista, eso sí que no me lo creí.
Besitos.
Que bien llevado este cuento, hasta el final! Lleno de atrapantes imagenes y sentimientos!
Hasta pudo sentirse ese aroma de almendras!
Y sí que pasa,un amigo vivió una historia semejante con una rusa...
la ingenuidad a veces duele.
besos
Hola José!! Me gustó muchísimo el relato. Tienes una imagunación increíble. Enamorarse de una imagen sucede, a veces consecuencia de la soledad , duele pero se puede encontrar otra en tantas páginas...
Muy bueno amigo.
Besossssss
Craso error, Josef, porqué abandonaste a Jelena? Que problema tiene Jelena? Es un ser libre, claro, sincero, no te engañó, no engañó a nadie, te mostró todas las cartas, tu las conocías de antemano. Tal vez te eche de menos, o no? Jejejje, buen relato, me gustó.
Besos. Eritia
Vuelvo, para decirte que te dejé un comentario en mi blog a tu comentario sobre las almadrabas, por si querías verlo.
No quería incluirlo en los comentarios a éste tu post.
Besos de nuevo.
Eritia
Sabía desde el principio que esto n oacabaría bien; las historias de sexo y pasión nunca tienen finales felices. Pero fue muy interesante mientras duró, o mientras se leyó. Pero que muy interesante.
Enhorabuena.
Hasta la proxima.
Pues me quedé pensando si era real, o simplemente la fantasía de una revista. El caso, es que con el juego de las letras y la forma pareciera que si, que si estaba con Jelena de forma real.
Otro besazo.
Según te iba leyendo me la iba imaginando como esos recortables de papel. Incluso veía cómo la desplegabas con serenidad y excitación, hasta que tomaba forma real.
Muy bueno, sigo con los anteriores, voy atrasada con tus relatos,
Exelente relato, las fantasias sexuales de un señor, confieso que es la primera ves que leo acerca de como pueden ser de fuertes, realmente me encanto amigo, el giro que le estas dando a tus cuentos fabulosos, un placer eterno leerte
Besitos siempre
Janeth
Fantástico, me ha encantado, te envuelve desde el principio. Es un relato con belleza narrativa y un trasfondo que no podemos ignorar: el deseo de aferrarnos a cualquier fantasía para huir de las realidades que no nos satisfacen.
Te felicito.
Un abrazo.
hola Josef...me gustó mucho! que amor tan platónico cargabas jeje es difícil aveces no ceder ante la ilusoriedad :/
saludos!
Me ha gustado las sensaciones que has dejado en el texto, las almendras dulces ;)
Besicos
Al final lo que queremos es amor, caricias.. comprensión, pasión....somos de verdad si queremos.
Buen relato me gusta.
besos con perfumes de romero
¡Menudo relato con aromas y sabores a almendras amargas!...mi enhorabuena por este magnífico relato.
Saludos.
Arwen
Me ha gustado el relato, mucho. Y no te preocupes, que queda claro que Jelena es una imagen, así como la soledad del protagonista, la soledad que le lleva a una cierta locura. :-)
Besos de pantera.
¡Excelente relato erótico, Josef! Una historia a la que no se le escapa nada: fantasía, pasión, locura, amor, desamparo, culpa y redención...
La redacción, muy buena, acompaña a la idea y la complementa en forma genial.
Besotes.
Hola Josef, perdón por mi ausencia en estos días. Estuve con algunos problemitas personales.
¡Qué relato corazón!... Leí por ahí que preguntabas si no era claro que no era de carne y hueso Jelena. Absolutamente claro, lo que le da al relato algo excelso, que es el paseo por las fantasias, de aquellas que quedan creciendo y viviendo dentro nuestro como una vida paralela.
Precioso!!!! Tenes un gran manejo del erotismo escrito. Te felicito!!!
Bessooooo
Fantasía a toda orquesta con un excelente director. Abrazos.
Solo me resta darte la enhorabuena una vez más, por un relato magistral, que ahonda como nunca en los sentimientos del ser humano, en su concepto de la vida y del mundo que le ha tocado vivir.., y como , en busca de si mismo y de la libertad, se deja llevar en alas de la fantasia, hacia otra realidad, paralela, que le devuelva la fe, el entusiasmo y las ganas de vivir
Un abrazo, con todo mi afecto y admiración
Me gustó el título.
Después leí la historia y...
Me gustó lo que narras.
Eres un "mákina" de los relatos.
;)
Un abrazo
Original como siempre tus escritos, que pena no tener más tiempo para poder leerlos antes, jooo siempre llego de los últimos jejejejejeje.
Buen cambio, la esencia de almendras por un bolso para su mujer jejeje. Que paradoja.
Un besazo.
Siempre defiendo que si uno se tiene asimismo ¿para qué más?
¿Se dará cuenta LAURA con su bolso de la pena de la otra abandonada en Taipei?
Jelena te sabe a Almendra.
Ella me sabe a licor dulce y embriagante, de efectos lentos pero eficaz.
Eres talentoso y te felicito.
Saludos descafeinados,
Está claro que si no queremos, jamás encontraremos el amor perfecto (y quizá no exista). Pienso tanto en Jelena como en Laura.
Es evidente que Jelena era una actriz de revista porno, una foto, aunque por varios párrafos pensé que era una muñeca hinchable comprada por revista o catálogo. Pero es que dices mucho más, Josef. Cuando necesitamos algo, lo buscamos donde sea.
Me encantó
Besos
Josef, hay que ver el relato tan fascinante que has conseguido gracias a la fotografía de una mujer con perfue de almendras amargas, que salía en una revista porno.
Es alucinante como transmites a través de tus letras tantas emociones, sentimientos... de ternura, amor, celos, odio, y todo a partir de una imagen sacada de una revista porno, genial.
Menos mal que al final se da cuenta el enamorado que no hay nada que hacer con una mujer así... ;)
Besos y que tengas una buena semana.
Isora
Una historia muy bien relatada de una mente talentosa como la tuya.
He hecho un alto en las vacaciones para poder visitar a los colegas.
Arrastras con el portátil, mirando el mar y sumergida en el rumor de sus olas almacenado en cientos de caracolas.
Un saludo
Hola José,
Como siempre nos tienes muy mal acostumbrados. Relato perfecto con la justa dosis de sensualidad.
Gracias y un abrazo,
ni la imaginación nos da tregua para llegar a un final feliz
magníficamente contado Josef
Besos
Qué imaginación, amigo. Y qué tiempos aquellos de las revistas en el armario o debajo de la cama.
Mira que han pasado años y he pasado por sitios y todavía no he encontrado a ninguna como las que salían en esas páginas
megusta esa mezcla tan acertada en tus relatos, de fantasía y realidad.
son como una pesadilla que se resuelve en un abrir y cerrar de ojos.
¡da gusto leerte! pena que no tenga más tiempo para leer todos tus relatos, en serio.
bicos,
se me olvidaba... verás, cuando vengo siempre leo uno al azar, puede ser el último o no, siempre me decido por el título o la foto que más llame mi atención, así que te rogaría que si escribes un relato que realmente piensas que va a gustarme y no he entrado y comentado, por favor, pásate por mi blog y recomiéndamelo ¿vale?... por mi forma de escribir y las impresiones en tu blog, sabrás, o te habrás hecho una idea de lo que me pueda gustar o no.
biquiños,
Estupendo relato Josef. A veces las ganas de encontrar el amor lleva a las personas a obsesionarse con una fantasía, con una imagen, con una ilusión, pero estas cosas tarde o temprano terminarn por esfumarse. Así como Laura seguía a su lado, sólo lo verdadero perdura a través del tiempo y la distancia.
Eres un gran escritor. Mi admiración siempre.
Me ha gustado mucho el relato mas cuando es una mujer ficticia realizando sueños imaginarios con el protagonista, con solo cerrar la revista todo acaba, si se pudiera hacer siempre asi, seria fabuloso.
Que mente mas prodigiosa tienes, me gusta mucho todo lo que haces con que facilidad escribes y lo mejor de todo es lo bien que transmites en ellos.
Primavera
Cada página entre los dedos va en busca de unos efímeros sueños…vestigios de pasión … ocultos se respiran …pero no florecen solo son vestigios del sol… hizo bien de comprarle el bolso a Laura …y guardar la quimera …te dejo un beso Josef genial como siempre
La soledad interior es la peor enfermedad que podemos adquirir, no importa cuantos seres nos rodeen, siempre existe aquel vació.
Cuando tropezamos con alguna ilusión de vida, la idealizamos hasta tal punto, que le otorgamos latidos, palabras y sentido de realidad.
Despertar es duro, pero es la única cura visible, hay utopías que pueden acabar con toda esperanza, de una posible felicidad, aunque sea ficticia.
Un beso.
Hola Josep
He tenido un mes de locos con el trabajo (en enero todo se normaliza cuando termine la cosecha) así que esta tarde que estoy tranquila te he estado leyendo. Me gustó muchísimo el relato de los rollos fotográficos de cuando eras niño, el recuento y los valores que rescatarías si volvieras atrás, a todos nos sucede.
En sí me quedé acá, me maravilla esa facilidad que tienes para hacer una historia tan real desde cualquier ángulo. ¿Quién no se enamoró alguna vez de esta manera? Sí, yo también me enamoré de un conductor de tele, de un vecino (que tampoco lo supo) y con el que tuvimos un amor lujurioso y demencial, lo malo era saludarlo a la mañana jaja.
Cómprate una nueva revista, quién sabe, por ahí el amor vuelve a tocar a tu puerta y logras olvidar a Jelena.
Desde lo literario es genial.
¿Te fijaste qué hay en el último cajón de la ropa interior de Laura?
Besos, buen fin de semana.
Es la primera vez vez que te leo y realmente me pareció un texto fantástico.
La imaginación no tiene límites y nuestros pensamientos tampoco... eso ayuda a soñar.
Abrazos, bello fin de semana!
Qué nos lleva al punto de imaginar y hasta sentir la esencia de almendras amargas en una imagen plasmada en una revista?, hasta donde llega nuestra posible soledad o desespero por lo rutinario de nuestra vida que arrancamos suspiros de nuestro vientre por alguien que quizás no existe?, lo cierto es que los sueños y la imaginación tienen un poder sorprendente en nuestra esencia y un límite que desborda en un posible abismo, pero imposible de llegar a él, así pues seguiremos imaginando, soñando y cruzando fronteras o derribando murallas para construir un mundo soporte del nuestro.
Un´placer José, besos
Desbordante y quizás bastante real. Estamos muy sólos y perdidos.
Tu imaginación me fascina y atrapa, y los tintes de "hipocresía genuina" ocultos por contraseñas ayudan al delirio de este asesino cornudo.
Besos inmensos,
tRamos
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